Hoy, Jesús Hernández, presidente de la Interagrupación ha participado en el programa Nuestras Fallas en Spektra y nos ha comentado lo que piensa del desarrollo y los cambios de la fiesta de las fallas.
- Jesús, buenas tarde.
- Hola Buenas tardes.
- El otro día escribiste algo referente al sentimiento fallero que la noche va ahogando.
- Si, no hace falta que venga nadie a ponernos normas ni trabas. La misma sociedad no está obligando al cambio. Y debemos de analizar si el cambio está siendo bueno o no lo está siendo. Y yo creo que no lo está siendo bueno, estamos transformando nuestra fiesta en otro tipo de fiesta. Para mi es una pena ver como por las mañanas, en casi todas las comisiones, esos almuerzos se han perdido, prácticamente no se hacen despertás, aparte de la problemática con las normas y demás, tampoco nos esforzamos. Nos complican un poco la vida por una normativa y no hay despertá, la quitamos, los pasacalles somos cuatro gatos. La vida en las comisiones empieza en fallas a las cinco de la tarde que es cuando empieza a aparecer todos los falleros. Esto no sucedía hace 20 o 25 años, la falla se vivía de día y se vivía de noche. Bajábamos a todo, se dormía poco o nada. Y ese es el cambio que a mi como Jesús Hernández no me está gustando porque creo que debemos despertar y explicar a los niños que la fiesta se vive de día. El turista la vive de día y tenemos que saber expresar esa fiesta de día otra vez y a lo mejor tenemos una generacion que la hemos perdido porque no hemos prestado la atención que deberíamos y nos hemos dejado llevar por esa sociedad que nos estaba demandando otra serie de actividades. Es el momento de analizar, pensar y poner la herramienta para que la fiesta no cambie y que nuestras tradiciones y costumbres prevalezca sobre lo demás.
- Pero a mi me da la sensación que somos unos cuantos románticos los que recordamos esos almuerzos, ese irte corriendo a ponerte el traje y salir en un pasacalles para visitar las fallas cercanas y saludar a amigos, volver, tomarte un aperitivo y ver la mascletá o traca larga, descansar y por la tarde ir a los actos o a la ofrenda, eso que durante el día no parabas y ahora, como bien dices, no se ve hasta las 5 o 6 de la tarde.
- Posiblemente seamos una minoría los que buscamos esto, pero esta minoría somos los que debemos de transmitir a los más pequeños lo que era la fiesta, lo que ha sido tradicionalmente, no dejar que muera porque si no, nosotros mismos estamos matando la fiesta y la estamos convirtiendo en una fiesta de cualquier población o de otra ciudad, es lo mismo. Con el beneplácito que estamos plantando una falla, más grande o más pequeña pero plantamos falla. Un falla que sirve como hasta de excusa para poder ir a la Virgen, a la ofrenda o realizar otras actividades y para eso se planta la falla. Plantamos algo para poder hacer esto. Debemos de transmitir que es nuestro emblema y es lo que nos diferencia de todo. Tenemos que luchar por plantar lo mejor, por hacer esas actividades, tenemos que luchar por no perder nuestra tradición. Como dijo Daniela, nuestra fallera mayor infantil, es un extraescolar, y si lo dejamos, se va a traducir en una fiesta de noche y la fiesta del día poco a poco la vamos a ir perdiendo. Y si la trasladamos solo a fiesta de noche vamos a tener más problemas con los vecinos por el ruido generado en la noche. Es todo para analizar todo fríamente.
- Una mesa de debate con varias partes, como las asociaciones de vecinos donde se debata la concienciación de la historia de las fallas. Normalmente la gente no sabe que pasaba en los años 80 o 90.
- Por eso hay que hacer esta labor y contar que durante 80 años llevamos haciendo esto, y desde hace 20 años lo estamos cambiando. Y me pregunto ¿lo estamos haciendo a mejor o a peor? Y si al final la gente dice que lo que quiere es este cambio, pues tendremos que asumir que la sociedad ha cambiado y que ahora se busca otro tipo de fiesta. Pero primero hay que analizarlo bien y saber transmitir lo que es la fiesta de la fallas que no hacerlo es nuestro gran error.
- Aquí hay una historia nos hemos olvidado.
- Es que ahora nos estamos preocupando en traer una buena orquesta o espectáculo para los nanos por la tarde y nos hemos despreocupado de enseñarles como se hace una falla, nuestras tradiciones pirotécnicas, de las grandes bandas de música, y nos hemos olvidado porque nos demandan solo juerga, juerga y juerga. Y eso está muy bien, soy el primero que pienso que hay que tenerla, pero que hay que entender y saber lo que es la fiesta de las fallas.
- Nos ponemos deberes pero tenemos un enemigo grande, la noche gana terreno al día. Solo madrugamos si tenemos que recoger premio el día 16.
- Y ni eso, a recoger premio no vamos más de 30 o 40. Yo recuerdo cuando tenía poco más de 20 años y era el último en irme de la falla y estar el primero, y si yo lo hacía, ahora también se puede hacer, pero ahora no hay ese espíritu de sacrificio. Yo me quedaba hasta las seis de la mañana y me tomaba en toda la noche dos cubatas, no ponía hasta las trancas y así podía luego vivir el día. Yo he visto imágenes este año paseando por Gran Vía o Ruzafa que a mi no me gusta ver. Y ¡ojo! Los falleros seguramente no son los responsables, que la gran mayoría que yo vi no eran falleros.
- Jesús, es un debate amplio que tenemos que tratar en profundidad. Muchas gracias por participar hoy en el programa.
- Gracias a vosotros.
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